
La Guardia Civil ha detenido esta mañana a Marisa Torres (36), maestra de 4º de Primaria de un colegio de Toledo, por su posible implicación en un caso de explotación infantil. Al parecer, la profesora aprovechó las últimas semanas de confinamiento y teledocencia para obligar a sus alumnos a coser y enviarle cientos de mascarillas que luego distribuía por toda la provincia de Toledo, obteniendo un gran beneficio económico. El Aula Today ha tenido acceso al interrogatorio, en el que la docente ha defendido su inocencia.
«Todo es un mal entendido. Soy una fanática del ABP (Aprendizaje Basado en Proyectos) desde que era pequeña y me gusta utilizarlo con mis alumnos. Cosiendo estas mascarillas están desarrollando un montón de competencias, no me lo podéis negar…», ha declarado la maestra.
La Guardia Civil ha incautado una gran cantidad de material tras el registro de la vivienda de Marisa. «Hemos encontrado el vídeo en el que la maestra explica a sus alumnos cómo convencer a sus abuelas para que les presten las máquinas de coser, es impactante», ha declarado el portavoz de la benemérita, visiblemente afectado. Además del vídeo, se ha encontrado también una rúbrica de evaluación en la que la profesora detallaba los estándares de calidad de las mascarillas. Si los alumnos conseguían hacer una FFP3 obtenían un sobresaliente, mientras que la mascarilla quirúrgica suponía un «5 raspao».
Los investigadores tratan ahora de averiguar si Marisa actuaba en solitario o podríamos estar antes una red de captación de menores a nivel nacional para la producción y difusión de mascarillas.