Alumno de 4º de Primaria exultante tras comprobar que la notita en la agenda que le pusiste en marzo ya ha prescrito


«David no ha parado de interrumpir la clase y molestar a sus compañeros en la hora de matemáticas». Así decía la nota que enviaste a uno de tus alumnos el 10 de marzo y que debía ser firmada por sus padres y devuelta a clase al día siguiente. Sin embargo, la clausura de los colegios por el Coronavirus ese mismo día evitó que la nota llegase nunca a los ojos de los progenitores de David. 

«Estoy muy feliz, mi equipo de asesoría legal me comentó que el plazo de validez de la nota era de solo dos meses, así que sí amigos…, ha prescrito y ¡SOY LIBRE!», ha declarado el niño, que ya no está obligado a mostrar la nota a sus padres.

El caso podría suponer un peligroso precedente para el mundo de las notitas en la agenda, que podría ver cómo más alumnos deciden acogerse a ya conocida como «Doctrina García».


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *